El Té y la Salud I

El Té y la Salud

El té contiene más de cuatro mil elementos beneficiosos para el organismo, que, como ya hemos comentado, ayudan a prevenir y paliar muchas enfermedades y dolencias diversas. Esto explica que el té aparezca, desde hace más de tres mil años, en la lista de las cincuenta plantas básicas de la medicina tradicional china.

Es tan grande su poder curativo, que nos parece adecuado elaborar una lista de todos los usos que tiene el té como medicina de uso interno y externo:

Ansiedad: El contenido de L-eanina (aminoácido) en el té es beneficioso para calmar la ansiedad y algunos investigadores comparan sus efectos con los producidos por el hipérico o por los fármacos antidepresivos como el Alprazolan. La teanina que se encuentra en el té es antiestresante, regula los niveles de dopamina y de serotonina y mejora la memoria, la capacidad de aprendizaje y el control de las emociones. La teína nos ayuda a cambiar de humor y reduce los síntomas de ansiedad al cabo de treinta minutos de la ingesta de una taza de té. Psicológicamente, el mero hecho de preparar tranquilamente un té ayuda a relajarse.

Artritis: La artritis reumatoide es una enfermedad inflamatoria crónica que afecta a las articulaciones de la mano, los dedos, el codo, la muñeca, las rodillas o los tobillos. Si se toman al menos cuatro tazas diarias, los polifenoles del té actúan como antiinflamatorios reduciendo los síntomas y, por consiguiente, el dolor.

Asma: La teína (cafeína del té) contenida en el té puede mejorar el flujo de aire hacia los pulmones, la broncodilatación. Sin embargo, no hay que excederse en su consumo para que los efectos de la teína no sean contraproducentes y puedan alterar el sistema nervioso y el sueño. Se recomiendan como máximo cuatro tazas diarias de té verde.

Cálculos renales: Los cálculos renales producen los dolorosos cólicos nefríticos conocidos popularmente como ataques de riñón o "piedras". Para prevenir la formación de depósitos o cálculos renales es indispensable beber muchos líquidos, y si en nuestra dieta incluimos dos tazas de té al día, facilitaremos la eliminación de dichos líquidos y mejoraremos las funciones del riñón. De todas formas, si padecemos del riñón no debemos excedernos en el consumo de té, ya que en grandes cantidades puede ser contraproducente, pues contiene ácido oxálico. Los oxalatos son un componente propio de determinados alimentos y se consideran un "antinutriente", puesto que dificultan la asimilación de algunos minerales. 
Continuará...